Apuestas online. Jóvenes, contextos, riesgos y adicción
Año:
2018-2019
Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas. Convocatoria del Fondo de Bienes de Decomisados, resolución de 31 de agosto de 2018.
2018-2019
Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas. Convocatoria del Fondo de Bienes de Decomisados, resolución de 31 de agosto de 2018.
A partir de 2008 empiezan a implementarse tecnologías digitales que permiten las apuestas online, especialmente de carácter deportivo. En estos diez años, la evolución tecnológica ha permitido diversificar la oferta y ampliar el mercado, con el consecuente aumento de clientes que apuestan online. Los avances tecnológicos permitirán a las empresas del juego continuar explorando los mercados e innovando sus servicios para hacer crecer su negocio. En este sentido, hipotetizamos que en la medida que el mundo digital sea aún más central en la vida cotidiana de los ciudadanos, más facilidad tendrán las casas de apuestas para captar nuevos clientes en un entorno virtual que les resulta conocido y cotidiano. Las dinámicas de los contextos virtuales permiten romper las coordenadas espaciotemporales habituales de los negocios y comercios offline (presenciales). En el sector del juego, la ruptura de las lógicas espaciotemporales posibilita apostar por internet desde cualquier punto geográfico y en cualquier momento. En consecuencia, más personas, desvinculadas del perfil clásico de jugador recreativo o patológico, se interesan por el juego de azar online, con el consecuente aumento del número de clientes. La posibilidad de jugar las 24 horas del día estimula el juego compulsivo y facilita las sesiones maratonianas, por tanto, el riesgo de desarrollar una adicción aumenta considerablemente.
En España, históricamente, el juego nunca se había sido considerado como un negocio cualquiera debido a su particularidad y al reconocerse las consecuencias funestas que puede provocar. La mayor parte del dinero que invierten los españoles era para jugar en apuestas del Estado con un gran componente popular y comunitario (El Gordo de Navidad, El Niño, la Primitiva o las quinielas). En los últimos años, las dinámicas socioculturales del juego hay cambiado. Entre otras consecuencias hemos perdido el factor de protección que entendía el juego como algo vinculado al ciclo anual y compartido por amigos, familiares y vecinos. Esta situación posibilita que el juego online se convierta fácilmente en compulsivo, individual y silencioso. En el ámbito sociocultural se están diluyendo los elementos comunitarios que funcionaban como mecanismo de protección, además en el juego online no existe ningún control social informal. Esta situación nos invita a hipotetizar que los problemas de ludopatía, en los próximos años, si no se revierte la situación, serán más prevalentes y graves.